Tres rutas en coche por la República Checa para conocer el país a tu aire
Recorrer en coche la República Checa es una de las mejores propuestas para conocer a tu aire, con total libertad, tanto los grandes atractivos turísticos del país como aquellos lugares pintorescos a los que no llegan los viajes organizados. Estos recorridos por carretera se pueden realizar durante todo el año, sólo necesitas un mínimo de tres o cuatro días y ganas de disfrutar.
Por: Pepa García
Publicado: Agosto 02, 2022
Como puedes imaginar, existe una infinidad de posibilidades a la hora de organizar una ruta en coche por la República Checa y cada recorrido descubre facetas diferentes del país. Puedes optar por conocer su aspecto más romántico enlazando sus castillos y palacios, rendir pleitesía a la naturaleza en sus muchos espacios naturales, visitar ciudades balnearias donde relajarte en sus espacios termales o incluso mezclar un poco de todo y obtener una interesante miscelánea. En esta ocasión, te proponemos tres itinerarios en coche que parten de Praga, donde puedes alquilar el coche, pero iremos desgranando otros en artículos posteriores.
1ª ruta: Bohemia del Sur y del Oeste en coche
Con una extensión de unos 800 kilómetros, esta ruta en coche por Bohemia del Sur y del Oeste requiere de al menos cinco días. Si quieres hacerla con tranquilidad, reserva una semana. También es posible seleccionar algún tramo para acortar la duración. Este itinerario es ideal para los amantes del bienestar, la gastronomía y los lugares con encanto, ya que, en apenas dos horas de camino, el ajetreo de la capital checa es sustituido por bosques frondosos y ciudades rodeadas de manantiales que han definido su histórica trayectoria termal.
Ciudades balneario
Los primeros días se pueden dedicar a conocer el Triángulo balneario checo formado por Karlovy Vary, Mariánské Lázně y Františkovy Lázně, y los numerosos atractivos situados en su entorno como el pueblo y el castillo de Loket, la ciudad de Cheb o el castillo palacio de Bečov, que alberga el famoso relicario de Santo Mauro. Puedes conocerlos mejor leyendo este post.
Pilsen y České Budějovice
Bien relajados, la ruta puede cambiar de rumbo y dirigirse a Bohemia del Sur realizando dos paradas previas: Pilsen, para conocer la cuna de la cerveza checa y visitar la factoría de Pilsner Urquell, y Hluboká nad Vltavou, donde se sitúa un romántico castillo estilo Windsor que parece sacado de un cuento de hadas. A pocos kilómetros de allí se sitúa la capital de Bohemia del Sur, České Budějovice, que cuenta con la plaza cuadrada más grande del país, y que acoge la fábrica de la cerveza Budweiser Budvar.
Camino de Český Krumlov
Tomando como campamento base esta ciudad, se pueden recorrer otros dos puntos fuertes del itinerario: Holašovice, cuyas granjas del siglo XVIII están incluidas en la lista de la Unesco, y Český Krumlov, una de las ciudades medievales más románticas de Chequia.
Y si aún quedan tiempo y ganas, es recomendable añadir al itinerario en coche dos lugares más: Třeboň, una población situada entre frondosos bosques donde comer las mejores carpas, y Jindřichův Hradec, con un elegante palacio renacentista. Desde esta ciudad se regresa a Praga, que está a sólo 140 kilómetros de este punto.
2ª ruta: Descubre la naturaleza de Bohemia del Norte
Los amantes de la naturaleza también pueden apuntarse a las rutas en coche, aunque en este caso, el vehículo se quede aparcado durante las excursiones y actividades por los entornos naturales de Bohemia del Norte. Al noreste del país se sitúan dos entornos de gran belleza y magia que merece la pena descubrir en un road trip de unos 400 kilómetros que conecta sus atractivos principales.
Paraíso Checo, etapas para un viaje en coche
Apenas a noventa kilómetros desde Praga se encuentra el primer destino de este itinerario, el Paraíso Checo o Český ráj. Basta salir del coche para olvidar instantáneamente los adoquines praguenses y enamorarse de la magnificencia de los conjuntos rocosos y las gargantas de arenisca de las Rocas de Prachov. Es un lugar para explorar sin prisa pero sabiendo que a pocos kilómetros se pueden visitar castillos y palacios como los de Hrubá Skála, Trosky, Kost o Sychrov que también merecen un alto en el camino.
Liberec
Tras la primera jornada de este itinerario se puede continuar hasta Liberec, la ciudad que vio nacer a Ferdinand Porsche, y que ofrece buenos servicios turísticos al viajero. A sólo 6 kilómetros se alza el pico Ještěd, la cumbre más alta de la región, donde se sitúan un hotel y un restaurante con unas vistas espectaculares. Despertar en este lugar regala una experiencia inolvidable.
Parque Nacional de la Suiza de Bohemia
El viaje puede continuar conociendo el Parque Nacional de la Suiza de Bohemia o České Švýcarsko, otro de los espacios naturales imprescindibles de la República Checa. Aunque su imagen más conocida es la magnífica puerta Pravčická brána, el arco de roca natural más grande de Europa, su interior reserva muchas más sorpresas, como la posibilidad de navegar en una balsa por el río. La excursión hasta el arco mencionado sólo se puede hacer de abril a octubre.
Děčín
La siguiente parada en esta ruta en coche es Děčín, una ciudad que siempre está en el radar de los amantes de las vías ferratas ya que ofrece 14 rutas de escalada adecuadas para todos los niveles. También es una zona ideal para rodar en bicicleta, o incluso realizar parte de la famosa GreenWay, la Ruta del río Elba, un itinerario de la red europea Eurovelo que transcurre por más de mil kilómetros en distintos países, cuatrocientos de los cuales atraviesan territorio checo.
3ª ruta: Moravia en coche en una semana
Esta última ruta en coche por la República Checa tiene una extensión de unos 900 kilómetros y permite conocer los mayores atractivos de Moravia del Sur. Algunas de las ciudades más emblemáticas del país se encuentran en esta región. Dos de ellas son Kutná Hora, cuyo centro histórico ha sido protegido por la Unesco, y Litomyšl, donde nació Bedřich Smetana, uno de los grandes compositores checos de música clásica. Otra parada imprescindible en la ruta es el castillo de Bouzov, que permite conocer el hogar de los caballeros teutónicos y sus numerosas obras de arte, antes de dirigirse a la bella ciudad de Olomouc, con su famosa Columna de la Santísima Trinidad.
Kroměříž y Brno
El viaje puede continuar haciendo una visita al Palacio Arzobispal de Kroměříž antes de llegar a Brno. Esta ciudad es perfecta para quedarse unos días, gozar de su animado ambiente y recorrer desde allí el Karst de Moravia, la mayor zona kárstica de Chequia y un lugar imprescindible para admirar impresionantes catedrales formadas por estalagmitas y abismos infinitos.
Lednice-Valtice y Mikulov
Antes de regresar a Praga, es recomendable hacer dos paradas más: una en el Paisaje Cultural de Lednice-Valtice, y otra en Mikulov, una preciosa población rodeada de viñedos donde visitar alguna bodega para conocer el vino moravo. Desde esta localidad, el regreso a España también se puede plantear desde Viena, ya que está a sólo 88 kilómetros.